Quizás escriba mil poesías
y no sienta mis errores.
Errante como el odio,
mortal como lo es él,
intentaré quebrar mi propia marca record
de amar en los silencios.
Comeré tu pan, oraré por ti,
cantaré a mi Cristo y en tu voz,
reforzaré mi Fe,
te sentiré más cerca.
Mis ojos brillarán para tu agrado,
mi pulso temblará en tu mano.
Lloverá ese día... estoy seguro...
y sonreiremos juntos tomados de la mano.
Los ruidos no serán molestos,
la sonrisa no será forzada,
los relojes detendrán, en ese día,
su monótona marcha digitada.
Mi muerte faltará a la cita
y la tuya, envidiosa de la mía,
ofendida se irá hacia lo lejos
y la batalla ya estará ganada.
Las sábanas, de seda y rojas,
recibirán a estos intrusos,
se dejarán marcar
y dormirán calladas.
Y así el amor por fin habrá llegado
de ojos verdes y en un beso.
Y estaremos juntos y por ti,
quizás escriba mil poesías
y no sienta tus errores.
Y mi niño podrá ser realidad.
Y mientras sueñes travesías
mi amor, solo por las noches,
quizás te escriba mil poesías...
de "Sin que te dieras cuenta"_ Eduardo Saín_2004 ® escrito argentino
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